Toys ‘R’ Us (Ya están aquí las Navidades)

El domingo salía del curro y, antes de que mi cabeza estallara a consecuencia del alcohol y terremotos del este con epicentro conocido (sic), encontré un catálogo de juguetes de El Corte Inglés. De repente, me vi de pequeño, señalando junto a mi hermano (y en color diferente, claro) con una equis los juguetes que quería que me trajeran los reyes.

La primera impresión fue pensar en cómo había engordado el catálogo con los años (casi al mismo ritmo que yo), y comprobar la cantidad de páginas que se dedican a videojuegos, películas y juguetes electrónicos. En nuestra época, tan sólo un par de páginas al final hablaban de las consolas de última generación como la NES o la Master System II. Al margen de ese dato, parece que hay una vuelta a los años 80, por ejemplo, con figuritas de Caballeros del Zodíaco o el Tragabolas (¡aún no han cambiado el anuncio desde que me lo compraron cuando no llegaba a la década!)

Algunos juguetes nunca mueren, sobre todo los de mesa (Trivial, Party and Co, Cluedo) que sólo evolucionan cambiando el juego de preguntas o vendiendo un DVD, pero lo que realmente está evolucionando hasta límites casi vergonzosos es el mundo muñequil. Desde las primeras muñecas robotizadas (casi exorcizadas) de los años 60, donde sólo daban espasmos o intentaban andar [mirar vídeo retrospecter abajo], la cosa se ha ido modernizando mucho. Tras el bebé que se cagaba y se meaba encima ya nada ha sido lo mismo, y los fabricantes se destrozan los sesos para sacar alguna novedad en sus muñecas. Este año la palma se la lleva Violeta, la muñeca del futuro. Por un módico precio de 139€ (¡en oferta!) la muñeca puede hablar pseudointeligentemente contigo, desobedecerte e incluso mearse encima con un inocente «uy, se me ha escapao« (aún tengo la boca abierta de la impresión que me dio verla decirlo en el anuncio de tv). Según su propia publicidad: «Violeta, la más lista. Muñeca interactiva de última tecnología, es capaz de mantener una conversación contigo. Su cara cambia de expresión según su estado de ánimo. Le gusta hablar, que le escuches y juegues con ella a cantar, imaginar, adivinar, etc. Reconoce sus accesorios y vestidos y algunas fechas especiales.»

Y todo ello sin contar la Introducción a la Masturbación infantil que supone Happy Nemo y sus aletas vibradoras, o el muñeco que tiembla espasmódicamente porque tiene frío. La última novedad, por cierto, es una alfombrilla electrónica que te enseña ¡ballet!

En fin, que las navidades ya están aquí (un poco antes cada año) y que ante tanto desaprovechamiento energético, las luces de las calles son un poco más histriónicas y potentes, para recordarnos que, aunque El Señor de los Anillos ya no vuelva por navidad, El Almendro sí. Hablando de El Señor de los Anillos, si alguno ha visto Dogville (y su escenario pintado con tiza), debería ver la parodia que circula por youtube, la versión resumida de las 3 entregas by Lars Von Trier.

Otro día hablaremos de Cortilandia, su cancioncilla pegadiza y su Belén enjaulado en un Zoo (¿qué pensará la Iglesia de todo esto?)

 

Top Five Toys ( Y seguro que alguno se me olvida… ¿Cuáles eran los vuestros?)

 

1. Trivial Pursuit

 

2. Subbuteo (y aquel otro juego de fútbol/baloncesto que iba por aire y cuyo nombre no recuerdo)

 

3. Tragabolas

 

4. Dino Riders (y sus tropecientosmil accesorios)

 

5. Cine Exin (o el desarrollo del músculo pajero)

 

[El día que me enteré de que los reyes eran los padres]